These last few days I haven’t stopped hearing news about young “influencers” who have become famous on social networks in an unreal life context that has gotten them into serious difficulties and my questions were what are we adults in charge of their education omitting? How can we, as parents, guide our children towards a life full of values and healthy decisions? The answer to those questions lies in love: a love that is firm, consistent and sets clear boundaries.
I think it’s a good time to reflect, and taking advantage of the value of the month I want to share with you my opinion, hoping it will be useful and resonate with all those who seek to guide their children in this complex digital age
Love as a fundamental pillar:
Love is one of the most powerful forces in parenting. It is not just about affection, but about creating a safe environment where children feel valued and understood.
A loving home fosters self-esteem and confidence, allowing children to develop in a healthy way.
However, love should not be confusing or indulgent; it should be accompanied by clear boundaries and expectations.
Love with Limits:
The key to effective parenting is loving, but firm, is based on the premise that limits are a form of love.
Setting rules and expectations helps children and teenagers understand the consequences of their actions and develop a sense of responsibility. When parents are consistent in enforcing these limits, children learn that love does not mean the absence of rules, but that rules are a way to care and protect.
Keep our children away from negative influences:
In this digital era, the admiration our children feel for certain“ influencers”, characters, games or programs, can lead them to idolize behaviors that are not healthy. However, parenting based on love and clear boundaries can help children develop critical thinking.
When parents engage in open conversations about what they see on social networks, or in other media, they can guide their children to critically evaluate content and recognize what truly adds value to their lives.
The importance of communication:
Open communication is essential in this process. By fostering an environment where children feel comfortable sharing their thoughts and concerns, parents can help their children understand the differences between positive and negative role models.
Questions such as “What do you think about what that character did, etc?” or “How does what you see/read/hear on … ?” make you feel?” can open the door to meaningful conversations. Banning or shutting down communication will cause your children to seek other sources of support. Don’t push them away.
Adapting love to each stage:
It is important to remember that love and boundaries must be tailored to the age and development of children. An approach that works for a young child may not be effective for a teenager. As children get older, it is essential to adjust expectations and allow them more autonomy, always maintaining a framework of boundaries, love and support. This will teach them to make informed decisions and take responsibility for their actions.
By encouraging open communication and adapting our approach as they grow, we can help our children become confident individuals, capable of making healthy choices and valuing what really matters in life. At the end of the day, love is the best legacy we can offer them.
In a world where external influences are increasingly powerful, love in parenting becomes a fundamental anchor. A love that is firm, consistent and sets clear boundaries, not only protects our children, but also teaches them to discern between what really adds to them and what doesn’t.
Be the best INFLUENCER for your child.
Lovingly,
Miss Gaby Castellanos
Head Principal
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El valor del amor en la educación
Estos últimos días no he dejado de escuchar noticias sobre jovencitos “influencers” que se han vuelto famosos en redes sociales en un contexto de vida irreal que los ha metido en serias dificultades y mis preguntas fueron ¿qué estamos omitiendo los adultos a cargo de su educación? ¿Cómo podemos, como padres, guiar a nuestros hijos hacia una vida llena de valores y decisiones saludables? La respuesta a esas preguntas radica en el amor: un amor que es firme, consistente y que establece límites claros.
Creo que es un buen momento para reflexionar, y aprovechando el valor del mes quiero compartirles mi opinión esperando que les sea útil y resuene con todos los que buscan guiar a sus hijos en esta compleja era digital
El amor como pilar fundamental:
El amor es una de las fuerzas más poderosas en la crianza. No solo se trata de afecto, sino de crear un ambiente seguro donde los niños se sientan valorados y comprendidos. Un hogar lleno de amor fomenta la autoestima y la confianza, permitiendo que los niños se desarrollen de manera saludable.
Sin embargo, el amor no debe ser confuso o indulgente; debe ir acompañado de límites y expectativas claras.
Amor con Límites:
La clave para una crianza efectiva es amorosa, pero firme, se basa en la premisa de que los límites son una forma de amor.
Establecer reglas y expectativas ayuda a los niños y adolescentes a entender las consecuencias de sus acciones y a desarrollar un sentido de responsabilidad. Cuando los padres somos consistentes en la aplicación de estos límites, los niños aprenden que el amor no significa la ausencia de reglas, sino que las reglas son una forma de cuidar y proteger.
Alejar a nuestros hijos de Influencias negativas:
En esta era digital, la admiración que sienten nuestros hijos por ciertos” influencers”, personajes, juegos o programas, puede llevarlos a idolatrar comportamientos que no son saludables. Sin embargo, una crianza basada en el amor y en límites claros puede ayudar a los niños a desarrollar un pensamiento crítico.
Cuando los padres se involucran en conversaciones abiertas sobre lo que ven en las redes sociales, o en otros medios, pueden guiar a sus hijos para que evalúen el contenido de manera crítica y reconozcan lo que realmente aporta valor a sus vidas.
La importancia de la comunicación:
La comunicación abierta es esencial en este proceso. Al fomentar un ambiente donde los niños se sientan cómodos compartiendo sus pensamientos y preocupaciones, los padres pueden ayudar a sus hijos a entender las diferencias entre los modelos a seguir positivos y negativos.
Preguntas como “¿Qué piensas de lo que hizo ese personaje, etc?” o “¿Cómo te hace sentir lo que ves/lees/ escuchas en …?”, pueden abrir la puerta a conversaciones significativas. Prohibir o cerrar la comunicación, hará que tus hijos busquen otras fuentes de apoyo. No los alejes.
Adaptando el amor a cada etapa:
Es importante recordar que el amor y los límites deben adaptarse a la edad y al desarrollo de los niños. Un enfoque que funcione para un niño pequeño puede no ser efectivo para un adolescente. A medida que los niños crecen, es esencial ajustar las expectativas y permitirles más autonomía, siempre manteniendo un marco de límites, amor y apoyo. Esto les enseñará a tomar decisiones informadas y a asumir la responsabilidad de sus acciones.
Al fomentar la comunicación abierta y adaptar nuestro enfoque a medida que crecen, podemos ayudar a nuestros hijos a convertirse en individuos seguros de sí mismos, capaces de tomar decisiones saludables y de valorar lo que realmente importa en la vida. Al final del día, el amor es el mejor legado que podemos ofrecerles.
En un mundo donde las influencias externas son cada vez más poderosas, el amor en la crianza se convierte en un ancla fundamental. Un amor que es firme, consistente y que establece límites claros no solo protege a nuestros hijos, sino que también les enseña a discernir entre lo que realmente les suma y lo que no.
Sé el mejor INFLUENCER para tu hijo.
